La Mari de Chambao y la importancia de concienciarse ante el cáncer de mama: "Antes solo veía las cicatrices"

La cantante vuelve a hablar sobre la enfermedad a la que tuvo que hacer frente en el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama
La Mari de Chambao y las secuelas físicas y psicológicas del cáncer de mama que superó
Cordon Press

Tiempo de lectura: 2’

La Mari de Chambao es uno de los muchos rostros conocidos que han atrevesado cáncer de mama. Una de esas mujeres que, tras haber superado la enfermedad, no se han cortado a la hora de hablar de ella. De dar detalles de cómo fue a nivel físico y emocional. Y, sobre todo, de la importancia que tiene hacerse exploraciones en casa, porque una detección a tiempo puede ser la diferencia entre salvarse o no. La artista lo ha hecho dentro de la jornada organizada por Divinity -nuestros compañeros de viaje para la retransmisión de CADENA 100 Por Ellas- '8M todo el año'.

Fue hace 17 años cuando, tras encontrarse un bulto en el pecho, acudió a que se le realizara una biopsia cuyo diagnóstico no dejaba luhar a dudas: carcinoma ductal infiltrante de grado 3. ¿El siguiente paso? Hacerse a la situación y echarle ese arrojo que nunca ha ocultado en sus actuaciones, en sus canciones o en cualquiera de las intervenciones públicas en las que se produce con naturalidad y llamando a las cosas por su nombre. Con el cáncer no iba a ser menos.




Miedos y esperanzas

"En la segunda quimio empezaron las calvas, es una imagen tuya fuerte que hace que tu autoestima baje", es una de esas frases contundentes que lanzaba a los presentes. Una charla a lo largo de la que habla de todas las secuelas físicas y psicológicas que le dejó esta enfermedad y que, con el paso del tiempo, fue superando: "Hoy me miro y veo las cicatrices, pero me veo a mi y a las cicatrices, antes solo veía las cicatrices".

A La Mari le quitaron parte de la musculatura al retirar ese tumor. Un cambio que le llevó a hacer que se le pasara por la cabeza la posibilidad de someterse a una operación para reconstruirse esa parte. "Un pecho es de un tamaño y el otro de otro. Me la intenté reconstruir, pero aquello no era para mí, prefiero aceptarme así", eran esas palabras salidas de su boca y que eran la antesala de uno de los consejos que habrás escuchado mucho, pero que es imprescindible seguir lanzando: "Tocarse es cuidarse". Es decir, hay que hacerse exploraciones, porque nunca se sabe cuándo vamos a poder encontrarnos una anomalía que pueda ser ese cáncer cuya detección precoz puede ser determinante para su cura.

"El miedo es el aliado, si tienes miedo agárrate a él, porque cuánto antes lo detectes antes puedes hacer algo con el cáncer", es uno de los últimos consejos que lanza. Que no nos dé miedo a esas revisiones en casa porque nos frene el temor a encontrarnos algo que nos cambie la vida. Porque ese pequeño cambio puede ser la antesala a una normalidad que dure mucho más tiempo.

Relacionados

CADENA 100