Actuaciones para la historia: así fue el emocionante regreso de Céline Dion y Lady Gaga a los escenarios

Tras un tiempo apartadas de la música por diversos motivos, la estadounidense y la canadiense volvieron en dos actuaciones por todo lo alto
Las actuaciones de Lady Gaga y Céline Dion
Cordon Press

Tiempo de lectura: 2’

“Es un regalo que nunca olvidaré”. Así describió con emoción Lady Gaga su reciente actuación en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos. Pero, sin duda, quienes nunca la van a olvidar son los miles de parisinos y personas alrededor del mundo que la vieron reaparecer tras dos años sin actuar en directo. Aunque si de emoción se trató, esa fue la que marcó el regreso de Céline Dion.

Por primera vez, la ceremonia salía del Estadio Olímpico para celebrarse por los diversos rincones más icónicos de la ciudad anfitriona, en este caso, París. Del mismo modo, en los últimos días, ya se especulaba sobre los diversos artistas que iban a actuar en la misma, siendo los nombres de ambas artistas lo que sonaban con mayor fuerza al ser vistas por las calles de la capital francesa. El resultado, dos actuaciones que no sólo quedarán en la historia de las ceremonias de apertura de unos Juegos Olímpicos, sino de la música.

La Lady Gaga más parisina

A las 19:30 del pasado viernes, se daba el pistoletazo de salida a la ceremonia inaugural de unos Juegos en los que la cantante estadounidense daba la bienvenida en un perfecto francés con un “Bon soir, bienvenue á Paris” (“Buenas tardes, bienvenidos a París”). Sobre una escalera dorada a orillas del río Sena y con las plumas como elemento dominante, la cantante aparecía con un un mono negro y una cola infinita de plumas rosas y negras como si de un cisne se tratase.

Al ritmo de Liza Minnelli en ‘Cabaret’, la estadounidense interpretó una versión de la canción de 1965 de Zizi Jeanmarie, ‘Mon trac en plumes’. Una canción que, de acuerdo con la cantante en una publicación en sus redes sociales, “sirve para honrar al pueblo francés y su tremenda historia del arte, la música y el teatro”. Abriendo el capítulo de la ceremonia, precisamente titulado ‘La vie en rose’, la intérprete de ‘Bad Romance’ bailó y tocó el piano en una actuación deslumbrante y con un equipo de bailarines muy entregado.



La emoción de Céline Dion

Y tal como comenzó la ceremonia por todo lo alto, la actuación final no iba a ser menos. Tras el emocionante encendido de la antorcha olímpica sobre un globo aerostático, precisamente en el aire Céline Dion fue la encargada de dar el broche final a casi cuatro horas de espectáculos y muchas sorpresas.

Subida en la mismísima Torre Eiffel y con la lluvia como complemento a las luces de la ciudad de fondo, la canadiense interpretó una versión acústica realmente emotiva de ‘L'hymne à l'amour’, de la artista francesa Édith Piaf. Todo un “himno al amor” por el que volvía a actuar en directo tras cuatro años apartada de la música. El motivo de su ausencia se debía al Síndrome de la Persona Rígida, un trastorno en el sistema nervioso que causa rigidez muscular, incluso espasmos.

Esta actuación supone todo un paso adelante en la trayectoria de la Reina de las Baladas, quien, en un reciente documental, cuenta los estragos que tuvo que pasar para recuperar de vuelta su voz. Gracias a ese trabajo duro, ha conseguido realizar una sobrecogedora interpretación que no ha dejado indiferente a nadie. Tanto fue así que la canadiense se paseó al día siguiente por las calles de París y los transeúntes se paraban para decirle “Gracias, Céline”.



Sin duda, se tratan de dos actuaciones que marcan la vuelta de dos grandes estrellas e iconos de la industria musical. Y no han podido elegir un mejor escenario con tanta acogida como son los Juegos Olímpicos.

Artistas relacionados

Relacionados

CADENA 100